Los cuñadísimos sevillanos que gestionan la Maestranza vuelven a estar en el ojo del huracán. ¿El motivo? El de todos los años por estas fechas: La salida a bolsa del abono sevillano.
El lío es mayúsculo y el cabreo generalizado. Si hasta se ha reunido un grupúsculo de personas a las puertas de la Maestranza esta mañana, para pedir la dimisión de la gente de Pagés. Normal, oiga. No se puede tener más falta de sensibilidad hacia algunos. Y es que,entre los asistentes a esa mini-concentración matutina que recriminaba la poca afición y el potente antitaurinismo de Pagés, cabe destacar al bombero-torero, quien, según han podido saber fuentes cercanas a este blog, el pobre hombre estaba de lo más ilusionado, tanto él como su cuadrilla de enanitos toreros, por acartelarse con toreros como Esaú Fernández, Javier Jiménez, Daniel Luque, Juan José Padilla o Fran Rivera, y los cuales tanta competencia le generan en el ruedo en los últimos tiempos al bombero metido a torero. Claro, también él tendrá derecho a que sus charlotadas formen parte de un abono serio, como les pasa a aquellos señores, ¿no?
También a las puertas de la Maestranza se ha dado cita esta mañana el de la "moto torera". Sí hombre sí, aquel señor que se acartelaba en algunas ocasiones con los recortadores, y en otras con el renombrado bombero-torero, y que montado sobre una moto hacía las delicias de las damas y churumbeles a base de carreras a todo trapo con una vaquilla detrás. Suponemos, por regla de tres, que el amigo motero estaría sopesando medirse mano a mano con el Fandi para ver quien cansaba antes a la vaca a base de carreras, uno en moto y el otro a pie obviamente. Pero al parecer, el amigo Fandila no pasaba por el aro de tener que hacerlo frente a una vaquilla, pues lo suyo son las ovejitas, que para eso luego le permiten sentarse sobre ellas a reposar la carrera, y de paso susurrarlas cositas en el oído, al más puro estilo Babe, el cerdito valiente.
Por algo parecido, dicen las malas lenguas, ha sufrido un injusto veto, también de Fandila, un conocido recortador argandeño llamado David Ramírez "El Peque", a quien también le va eso de subirse encima de los toros. Pero como este señor imponía que hubiera toro y además había que subirse encima estando el animal en pie y no echado, al amigo granadino le han entrado los siete males y ha dicho que nanai de la China.
No se les ha visto esta mañana en las puertas de la Maestranza, pero de nuevo las malas lenguas atribuyen a Curro Romero y a Paco Camino un cabreo bastante solemne porque, según parece, a Espartaco sí y a ellos no. De este hecho podemos prever un par de cosillas, conociendo como se las gastan los cuñadísimos: Una, que el domingo de Resurrección de 2016 hagan el paseo mano a mano en el Baratillo los dos cameros, o dos, que las próximas navidades los aficionados tengamos que pedir a Melchor, Gaspar y Baltasar unos billetes de avión rumbo a Senegal.
Por otro lado, en twitter el ambiente no estaba menos caldeado. Unos, clamaban al cielo en detrimento de la ausencia de Diego Urdiales. Y digo yo, ¿para qué querrán a ese torero en las ferias? ¿Para que desmonte las mentiras de la actualidad, y por consiguiente más de uno se quede en paños menores o en pijama? No, gracias.
Otros, se quejaban, y de hecho llevan ya unos cuantos días quejándose, de que no se han acordado de Juan Mora, de Alberto Aguilar, de un sevillano que sabe torear muy bien y que se llama Luis Vilches, de Morenito de Aranda, de Fernando Cruz, o de otros pocos que también podrían dejar en calzones o en pijama a más de uno. Sí, han acertado, se trata de aquellos aficionados a la rancia tauromaquia de hace años en la que se estilaba el toro fiero y poderoso frente al matador capaz de domeñarlo. Esos mismos aficionados, (no se esperaba menos de ellos, claro) no han dejado de mostrar su satisfacción porque en la de Miura se anuncie un tal Iván Fandiño, el mismo que parecía que ya había asentado la cabeza a base de anunciarse en carteles con ganado y toreretes de glamour; o porque un hierro como Torrestrella, que suele dar interesan... digoooo talibanes resultados, deje de ser estoqueada por los guapetes que salen en Telecirco a todas horas, y la vayan a lidiar tres toreros de verdad; o que Manuel Escribano mate la corrida del Paleto y la de Miura. Y lo peor de todo, es que sobre este último hecho, hay quien va más allá y se atreve a declarar que es la primera vez en la historia de la Feria de Abril que alguien hace algo así. Por Dios, ¿no ven que podemos dejar en paños menores o en pijama a más de uno? Hagan el favor de ser más cautos.
No todo son notas negativas en lo que respecta este tema, pues la industria textil está de enhorabuena, ya que, según previsiones del último barómetro del CIS realizado entre los abonados sevillanos en las últimas horas, la venta de pijamas se disparará en potencia a lo largo de las fechas venideras. Lo que no termina de aclarar la citada encuesta, es si esto se debe a la irremediable modorra que se les avecina a los señoritos abonados en la próxima feria, o porque se quiere imitar a algún personajillo con el fin llevarse a pares a las morenazas andaluzas a bailar al Real. Sea por lo que sea, la Feria de Abril correspondiente al ejercicio 2015 no dejará de ser la Feria del Pijama.
Luis:
ResponderEliminarClavado. Ayer por la noche dejé una entrada en mi blog y vengo a decir lo mismo que tu. Muchos se han molestado cuando sobre Urdiales, los dos empresarios han dicho aquello de que "no tenían hueco para el". Efectivamente, entre tanta miseria en una feria devaluada y con la ausencia de toro, Urdiales está fuera de sitio. Pero es que después ves carteles y piensas que Urdiales solo vale mas que los tres que forman ese cartel.
Si te digo que me alegro mucho por Javier Jimenez. Es un buen torero, que ha cambiado mucho desde su etapa como novillero. Se ha reposado mucho y estuvo muy bien el año pasado. Sobre la ausencia de mi amigo y hermano Luis Vilches...ni te cuento.
Un abrazo Luis.
Marín:
ResponderEliminarUrdiales molesta. Así de simple. Y una cosa te digo, que siga molestando por muchos años. Sería señal inequívoca de que sigue por su redil de pureza y clasicismo.
Sobre Javier Jiménez te sigo que llevo sin verlo desde que era novillero y aquí en Madrid, y lo que le vi en 4 o 5 tardes no me gustó para nada, le vi otro pegapases más al servicio del toreo moderno. Pero mira, si tú me dices que ha cambiado para bien, yo me lo creo y le seguiré a ver con qué me sorprende.
Sobre Luis Vilches pues mira, la última vez que le vi fue en 2008 con una del Conde de la Maza aquí en Sevilla, y estuvo fenomenal el tío. Desde entonces, sigo esperando poder verlo, creí que es un torero muy recuperable.
Un abrazo Marín.