No levanta cabeza la ganadería de D. Tomás Prieto de la Cal, que hoy ha vuelto a lidiar otra infumable novillada, esta vez en Valdemorillo. Nos llena de pena a los aficionados que el panorama de una ganadería que representa un encaste mítico y prácticamente extinguido pinte tan feo, pero por desgracia es así y este ganadero debe replantearse muy seriamente la situación de su ganadería.
Buenos mozos han sido los lidiados en 1º y 5º lugar y el devuelto 6º, siendo más justos de presencia el resto, aunque todos ellos muy dignos para plaza de tercera. Flojísimos y sin una gota de casta en sus venas han sido los tres primeros novillos, tónica que ha cambiado en cierta manera con el 4º novillo, que ha sacado casta aunque sin ser un derroche. El 5º, con un poco más de fuerzas, hubiera sido también un novillo interesante; y el 6º ha sido otro borrego infumable. Lo dicho, una lástima de novillada.
¿Y los novilleros? Pues... muy verdes y con mucho por aprender, para qué vamos a decir lo contrario si sería mentira. Sobre todo César Valencia y Daniel Crespo, que sí han contado con una oportunidad en sus respectivos segundos turnos para decir algo. Pero ni ellos han dicho nada, ni nadie les ha dicho que este encaste es para reventar a los toros con no más de 15 muletazos, después de someterlos a principio de faena, y a matar. Pues ha sido lo contrario, que es dar cuarenta y pico mil trallazos criminales de todos los colores, perdiendo muchos pasos y pasando grandes apuros. Prácticamente inéditos han quedado en sus primeros turnos, con dos auténticos borregos que no han dado opción. Pésimo e infumable también ha sido el lote de José Antonio Carreiro, quien no obstante ha demostrado que está muy verde aún y que debe progresar. En definitiva, ya pueden ponerse las pilas, sobre todo con el carretón, pues el manejo de espadas del que han hecho gala esta tarde ha sido delirante, dejando patente que no se puede matar peor.
Como nota positiva de la tarde, destacar el gran puyazo con el que Tito Sandoval nos ha deleitado en el tercero de la tarde; y los torerísimos pares de banderillas de Fernando Sánchez tanto a este como al 6º. Sin duda, lo mejor y único reseñable de la tarde. Estos dos sí que no suelen fallar,
Pues llevas toda la razón Luis. Si a mi como aficionado me da rabia, imagínate teniendo esta ganadería al lado de casa.
ResponderEliminarMe consta el esfuerzo y el empeño que pone el ganadero, pero ya esto no es cuestión de mala racha. Tiene que buscar soluciones ya. Si tiene que refrescar, que busque y refresque, porque es mejor eso que mandar un hierro y encaste mítico al matadero.
Una lastima la verdad. Un abrazo Luis.
Así es Marín, una gran pena. Tiene mucho trabajo Don Tomás por delante y ojalá saque el hierro a flote, pero lo malo es que los últimos acontecimientos le puedan mermar el ánimo.
EliminarUn abrazo.