El escritor portuense Rafael Alberti, uno de los poetas más importantes de la literatura española de la Edad de Plata, también quiso ser torero de niño y dedicó parte de su obra poética y pictórica al tema taurino. En 1935, al año siguiente de la muerte de su amigo Ignacio Sánchez Mejías, publica su elegía Verte y no verte. He aquí un fragmento de dicho poemario.
VERTE Y NO VERTE (1935)- RAFAEL ALBERTI
[...]
Por el mar Negro un barco
va a Rumanía,
Por caminos sin agua
va tu agonía.
Verte y no verte.
Yo, lejos navegando;
tú por la muerte.
Verónicas, faroles,,
velas y alas.
Yo en el mar, cuando el viento
los apagaba.
Yo, de viaje.
Tú, dándole a la muerte
tu último traje.
Mueve el aire en los barcos
que hay en Sevilla,
en lugar de banderas,
dos banderillas.
Llegando a Roma,
vi de banderillas
a las palomas.
Por pies con viento y alas,
por pies salía
de las tablas Ignacio
Sánchez Mejías,
¡Quién lo pensara
que por pies un torillo
lo entablara!
…………….
Una barca perdida
con un torero,
y un reloj que detiene
su minutero.
Vivas y mueras,
rotos bajo el estribo
de las barreras.
Verte y no verte,
Yo, lejos navegando
tú, por la muerte.
[...]
[Se ha ilustrado esta entrada con el retrato de Sánchez Mejías realizado por el pintor Enrique Martín (torosgradaseis.blogspot.com) y una fotografía aparecida en lagrantemporada.blogspot.com ]
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